La humedad no es, precisamente, la mejor amiga de las paredes. Tampoco de la salud de los habitantes de la casa. Se trata de un problema común en los hogares, que trae aparejados numerosos inconvenientes.La humedad es antiestética, trae malos olores, y puede generar problemas respiratorios. Es lógico, entonces, que se la quiera eliminar de forma definitiva. Hay varias maneras de combatirla, aunque algunas son más eficientes que otras.
Formas de combatir la humedad
- Con una obra: una manera de acabar con la humedad es con un tratamiento impermeabilizador en las paredes. Se trata de una obra mediante la cual es necesario perforar la pared cada poca distancia, e inyectar un producto químico que hace retroceder la humedad.
- Si bien cuando se aplica correctamente es una solución duradera, debe ser realizada por un experto. De otra manera, se hará toda una obra en la casa sin obtener resultados. Justamente por eso, resulta también costosa: depende de una obra y de profesionales que la lleven a cabo. Finalmente, es una solución lenta, ya que debe pasar un tiempo desde que se aplica el tratamiento hasta que la pared seca y se puede pintar o revestir.
- Revestimientos impermeables: son una manera de disimular la humedad, pero no de acabar con ella. Esta clase de revestimientos no absorbe la humedad, sino que solamente la cubre. Así la misma sigue avanzando, aunque no se vea, y el estado de las paredes empeora.
- Revestimientos permeables: se trata de una forma de ocultar y absorber la humedad. Sin embargo, tienen una desventaja: como no liberan la humedad, al tiempo terminan por estropearse. Este tipo de revestimientos pueden ser madera o drywall. Se trata de una solución fácil y económica pero poco duradera.
Humedad cero en tus ambientes
De todas las formas de acabar con la humedad de las paredes, hay una que sobresale del resto. Se trata de las placas antihumedad. Son revestimientos, pero muy distintos a los ya mencionados. Las placas antihumedad tienen un moderno sistema que por un lado absorbe la humedad, y por otro la evapora de forma gradual. De esta forma, acaba de manera definitiva con el problema. Son más duraderas que cualquier otro revestimiento, pero su colocación es rápida y cómoda, pudiendo instalarse en un día.